Si todavía no incursionaste en el arte de elaborar tu propio pan, te acerco esta receta simple para que comiencen a poner las manos en la masa.
En los talleres sugiero comenzar con levadura, porque podemos lograr texturas y sabores que cubran nuestras expectativas, y nos motive a seguir elaborando nuestro propio pan. Siempre cuidando de elegir un cereal integral, orgánico y una fermentación lenta, cubriendo también nuestras necesidades nutricionales.
Una vez que hayas logrado el hábito de elaborar tu propio pan en casa, te recomiendo utilizar masa madre, como leudado natural, dado que es mucho más saludable para nuestro organismo. (Ver receta de Masa Madre)
Ahora bien, hay que acostumbrarse al sabor, la textura, y planificar su preparación antes de elaborar el pan.
He observado que muchas personas no elaboran pan, porque no llegan a preparar la masa madre. Y luego terminan comprando un pan de panadería o dietética con aditivos, mezclas de harinas poco digeribles, entre otras cosas.
Entonces, sin volvernos obsesivos, siempre va a ser mejor preparar un pan en casa, conociendo los ingredientes (harina integral, agua, sal rosada, oliva, levadura, ¡y nada más!) y con nuestra energía, que un pan comprado desconociendo sus pasos de elaboración y con una lista larga de ingredientes, muchos de los cuales desconocemos.
Antes de volvernos puristas, seamos realistas de que es lo que podemos llevar a la práctica para comer mejor.
Por eso es que sugiero ir paso a paso…
¡Eso sí!, el pan debe llevar una fermentación lenta para poder transformar sus almidones en azucares más asimilables para el organismo. Pero, no por eso, tengo que quedarme alado del pan viendo como leuda. Puedo planificar el armado del bollo antes de una actividad, y al regresar lo llevamos al horno.
– 500gr de harina integral de trigo orgánico extra fina
– 5gr de levadura seca en polvo
– 1 cucharada de azúcar integral mascabo
– 2 cucharadas de aceite de oliva primera prensión
– 1 cucharada de té de sal rosada del Himalaya
– Agua tibia cantidad necesaria (1 taza aproximadamente)
Preparación:
En un recipiente colocar la harina, la sal rosada y mezclar bien. Realizar un agujero en el centro, y colocar el aceite de oliva, la levadura, el azúcar y un poco de agua tibia.
Comenzar a unir la preparación agregando agua hasta lograr una masa homogénea. Llevar a la mesada y amasar bien hasta formar el bollo.
Colocar nuevamente en el recipiente y tapar con un lienzo o repasador. Dejar fermentar, en un lugar templado, entre 8hs y 12hs. Se puede dejar hasta 24hs sin ningún inconveniente. A mayor tiempo, más asimilable para el organismo, pero obtiene un sabor ácido más intenso.
Luego del tiempo de fermentación, amasar nuevamente y darle la forma del molde que vamos a utilizar.
Colocar el bollo en el molde o fuente previamente pincelado con aceite de oliva, y dejar leudar hasta que duplique su tamaño.
Luego cocinar en horno, a 160°, durante 50 minutos aproximadamente. Retirar del horno, entibiar y desmoldar.
Es una opción saludable para complementar nuestros desayunos o meriendas. También podés preparar sándwiches saludables para llevar al trabajo o brusquetas simples con humus de garbanzos o un queso crema de semillas, con hojas verdes y palta para una cena liviana.
Que tus sentidos disfruten del aroma a pan recién horneado en tu cocina…
Abrazo de luz!
Romi